Soy una persona sencilla, nacida y criada dentro de la clase social que se considera el pilar que estabiliza tanto una nación como su democracia: la clase media. En la República Dominicana, esta clase se define como la parte de la sociedad que paga lo que los ricos no quieren y lo que los pobres no pueden.
Quiero ser claro: no tengo ningún problema con lo que cada quien decida hacer con su vida a nivel personal. Soy un defensor aférrimo de la democracia, del derecho a la libre expresión y al libre pensamiento, derechos que considero inalienables. Sin embargo, también soy un defensor de la razón, la lógica y la verdad. En cada artículo de mi blog, me esfuerzo por ser imparcial y no violar la regla más importante de la filosofía, la ciencia y la educación: la dialéctica.
Aparentemente, en esta época, se quiere sustituir la razón y la lógica por un pseudo sentimentalismo manipulado, donde exponer cualquier idea contraria a la manipulación mediática o que invite a la reflexión se percibe como una amenaza. Vivimos en una generación que, en sus cortos años de existencia, muestra claras evidencias de decadencia. Desde mi punto de vista, esto no es más que una sublimación ideológica que solo busca dividir, confundir y marginar con una intención malsana a una sociedad ya en decadencia moral.
Freud decía: "Las masas nunca han tenido sed de verdad. De las irrealidades exigen ilusiones, de las realidades no pueden tolerarlas". Esta reflexión es más pertinente que nunca en una era donde la manipulación mediática y el sentimentalismo superan a la razón y la lógica.
Aristóteles, en su defensa de la lógica y la verdad, afirmó: "El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona". Mi compromiso es con la reflexión crítica, no con la aceptación ciega de ideas impuestas.
Galileo Galilei, enfrentado a la censura de su época, dijo: "No puedes enseñarle nada a un hombre; solo puedes ayudarlo a encontrar la respuesta dentro de sí mismo". Mi objetivo es precisamente ese: ayudar a mis lectores a encontrar respuestas dentro de sí mismos a través del pensamiento crítico y la reflexión.
No voy a pedir perdón por no lamentar el decir las cosas que digo, y mucho menos voy a pedir perdón por expresar lo que pienso. Mis ideas están sustentadas en bases lógicas, experiencia y ciencia real. Por tanto, les recomiendo que, si tanto les molestan o repugnan mis análisis filosóficos, hagan uso de su derecho democrático de ignorarme. !!!EN EL BUEN DOMINICANO DEME BANDA!!!
Muchas gracias.
Att..Job Vasquez.
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